La startup alemana softr.io ha conseguido captar 13,5 millones de dólares en una reciente ronda de financiación de serie A, lo que cuenta TechCrunch en un artículo de 19 de enero. Está empresa berlinesa, centrada en el sector del no-code, se fundó en 2019. Tiene en la actualidad 24 empleados y el apoyo de 19 inversores.
Softr.io ha superado la fase de capital semilla, que es la ronda inicial en cualquier startup, enfocada a crear un producto mínimo viable. Ahora, gracias a esta nueva financiación, la compañía se dispone a incrementar las ventas. Cuenta con 30.000 suscriptores, 1.000 de los cuales están acogidos a algunos de sus planes de pago.
Qué es el movimiento no-code o sin código y low-code o código bajo
El movimiento no-code o low-code ha experimentado un fuerte crecimiento en los últimos años. La filosofía que está detrás de él es diferente al código libre u open source, protagonizado por desarrolladores informáticos que crean productos útiles para la comunidad gracias a su trabajo desinteresado (como ocurre con LibreOffice o Linux). En el no-code, la premisa es diferente: ayudar a los usuarios finales (empresas, startup u otros desarrolladores) a que puedan construir sus propias aplicaciones y herramientas informáticas sin necesidad de saber programar, de ahí lo de “sin código” o “de código bajo”. Con no-code se diseñan bases de datos, webs, ecommerce, automatizaciones, etc., adaptados a las necesidades de las empresas y sin escribir una sola línea de código.
Los tecnológicas que se dedican al no-code ponen las herramientas necesarias a los futuros desarrolladores a cambio de una suscripción, aunque también ofrecen planes gratuitos con limitaciones para que se pueda probar el producto. Es el usuario final el que, utilizando estas aplicaciones no-code, elabora su propia base de datos, CRM, la app o un sitio web.
Para qué se puede utilizar Softr.io
Softr.io tiene bastantes opciones de personalización y adaptación a las necesidades de la empresa. Con esta plataforma se crean webs estáticas (una web simple corporativa o personal) o dinámicas (como un comercio electrónico). Estas últimas, están apoyadas en tablas de Airtable (otra plataforma no code con la que se construyen potentes bases de datos). Softr.io se encargaría del frontend, mientras que el backend estaría realizado con bases de Airtable.
Para desarrollar la aplicación, contamos con un potente constructor de bloques que facilita mucho el trabajo. Básicamente, lo único que hay que hacer es arrastrar y soltar los diferentes elementos y después hacer las correspondientes conexiones con las tablas. También se diseñan potentes formularios, que sirven para captar información de clientes, realizar encuestas, datos de alumnos…
La estética del producto es sobria, pero tiene opciones de personalización para que encaje con la imagen corporativa del cliente. El periodo de aprendizaje de Softr.io es reducido. Aunque no hace falta saber programar, si que es necesario tener un cierto perfil técnico para exprimir al máximo todas sus posibilidades.
El ecosistema no-code parece superpoblado, no hay semana que no se conozca alguna novedad. Existen muchas herramientas que sirven para lo mismo. De aquí a unos años, algunas de ellas previsiblemente desaparecerán o se fusionarán entre sí. Está claro que contar con el apoyo de inversores, como en el caso de Softr.io, es una baza muy importante para garantizar su futuro.
